SEGUNDO CONGRESO NACIONAL JUVENIL DE FILOSOFIA
A partir del 19 de octubre del presente año acompañamos a los jóvenes de varios colegios de Capital Federal y gran Buenos Aires a protagonizar en este Segundo Congreso. La actividad finalizó el 4 de noviembre en el Colegio Esteban Echeverría de Capital Federal.
La convocatoria tuvo su primera aparición el año pasado. Este año, se pretendió convocar a la juventud alrededor del Bicentenario, donde la pregunta central giró sobre el compromiso al cambio:
“Vos, ¿dónde estás?”
Los jóvenes y el Bicentenario:
Devenir histórico e identidad en la globalización, en sus diferentes manifestaciones
No vamos a detallar acá el fundamento del encuentro, Podrán apreciarlo en el portal oficial del Congreso: http://www.congresocee.blogspot.com/. Solamente en este lugar de la Revista Cultural
Podemos comenzar presentando…….
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El país en el S. XIX intentó definirse como Nación. Después de la caída de Rosas se fueron dando los pasos hasta lograr en la década del 80, un perfil de Estado.
Durante este proceso, los planteos educativos existieron apreciándose la postura de Sarmiento como la de Alberdi. Aunque se observaban matices o diferencias en la concepción educativa entre ambos, fueron propiciadores de un proyecto que impulsaría cambios en la sociedad.
En los comienzos del S. XXI, la realidad internacional, producto del avance de los procesos globalizadores, nos encuentra asimétricamente con desarrollo económico y social de los países avanzados. En la Argentina –que atraviesa una de las peores crisis de su historia- “la igualdad de oportunidades” asume hoy un carácter de exigencia dramática de preservación de los derechos esenciales, planteándose la necesidad de incluir a todos los habitantes en el sistema educativo, para evitar así la profundización de los desniveles formativos que agravarían las diferencias sociales.
Nos debemos un nuevo posicionamiento internacional, que obliga a mediar por medio de la educación, preguntándonos si esta igualdad de oportunidades (¿a todos?) apunta a concretar las nuevas competencias que el neoliberalismo nos está solicitando; o al contrario, es una oportunidad para redefinir los alcances de nuestra identidad.
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La mayoría de los pensadores antiguos implementaban las palabras como expresión clara de su pensamiento. En Grecia se debatía si el “logos” era lo adecuado para la denominación de las cosas y de la vida social, ya que era algo creativo del sujeto hablante; o una expresión de lo que se develaba – “aletheia” - a partir de lo observado.
El panorama actual, si lo queremos ver desde lo social, económico y cultural, no es el mismo de esa época; ni tampoco parecido a los cambios revolucionarios del Renacimiento. Vivimos procesos más complejos y de globalización.
En la actualidad se ha instalado el término gobernabilidad, como referente de algo que socialmente se aprecia para rectificar o ajustar situaciones sociales, culturales y económicas. Pero también, se puede usar de una manera más compleja incluyendo una multiplicidad de variables para el análisis de la realidad. Estas diferentes miradas nos llevan a pensar que los términos, como es en este caso, que de acuerdo al contexto que uno quiere marcar o demarcar, restringen el sentido o pueden profundizar conceptualmente, poniendo de manifiesto a la gobernabilidad como un término cerrado o abierto, de acuerdo a la intencionalidad del sujeto.
Otra premisa que me parece importante considerar, es la existencia del concepto como referente o ámbito de lucidez para interpretar la realidad; o si no su aparición como tal, emergiendo del análisis de una realidad compleja. Cada una de ellas muestra una postura epistemológica. La primera se presenta como instrumental o “razón instrumental” (Horkheimer, 2001), ya que el uso del concepto permite clarificar la realidad. En cambio, la otra se da desde una mirada más hermenéutica (Gadamer, 2005), donde el concepto aparece en la búsqueda de sentido a partir de la diversidad de situaciones.
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De Marcos Fregosi
Nobuko-UAI
Comentario:
Este libro intenta provocar en el lector un pensamiento distinto al que se puede tener sobre la actualidad, ya que cierta literatura que circula apunta más a una simple descripción de lo cotidiano, sin llegar a explicitar el conflicto real de la denigración humana y la necesidad de solucionarlo por medio de una actitud solidaria aceptando las diferencias.
Este texto se viene trabajando en las clases y en mi tarea docente como asesor en los distintos establecimientos que superviso. Por otro lado, en mi lectura y observación de la realidad, veo la necesidad de entender que la relativización de una cultura que se impone por medio de la globalización no permite respetar la creación y la libertad que cada persona tiene por ser tal. Y este cambio de mentalidad se puede dar nada más que por medio de la educación; y con la instrucción o del adiestramiento de nuevos hábitos que tienden a la simple acomodación al cambio actual.
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Ensayos sobre Biopolítica
Excesos de vida
Gilles Deleuze/Michel Foucault/Antonio Negri/Slavoj Zizek/Girgio Agamben
Paidós
Comentarios de los integrantes:
6-7-10 – Marcos - (a la tarde)
Como lo dije anteriormente, me pareció muy oportuna la elección de Claudio. Apruebo y creo que nos da varias pistas para avanzar en el análisis.
En primer lugar, nos coloca en un lugar para mirar, alejado de la lectura clásica de la Filosofía en donde el ser y el ente eran las preocupaciones para pelear el espacio con las demás ciencias.
Ahora, aparece la vida. Creo que el primer párrafo del Prólogo encierra una serie de conceptos a partir de instalar la Vida como eje de revelaciones para constituir acontecimientos posteriores, partiendo de la singularidad a la individualidad. Esta dinámica de observación construye una lógica que se aparta de las construcciones científicas que veníamos acostumbrados desde el positivismo, para ver en esta realidad de la VIDA un panorama amplio y complejo a la vez, bastante alejado de certidumbres.
No hay lenguajes constituidos para descifrarla, sino que el lenguaje debe crearse o descubrirse ya que el punto de análisis es otro. No hablamos de la muerte, ni tampoco del ser para la muerte. El Dasein de Heidegger que fue bastante expuesto, se deja de lado para ver si hay sujetos que puedan hablar de la vida. No sé si ella es el punto de partida; no sé si es un hecho de evidencia; no sé si es la idea principal. Está ahí la vida y a partir de ahí hablamos de ella como algo indefinido para llegar a lo definido, no porque lo determinemos nosotros, sino que lo debemos buscar.
Quien sabe esta búsqueda estará en el poder de alguien constituido por el Estado; o replantearnos esta instalación para reinstalar el real sentido de la vida.
Por ahora, estos son mis reflexiones que se desprendieron del primer párrafo de la primera página del Prólogo.
20-7-10 – Marcos - (a la tarde)
Retomo nuevamente la línea de reflexión anterior y avanzo sobre el Prólogo.
Los autores ponen a Foucault como el que origina la relación “modernidad y biopoder” sobre el concepto de hombre que ya había definido Aristóteles como “un animal viviente, y además capaz de existencia política” (E.B.: 9)[1]
Y avanza un poco más y afirma que en el “umbral de lo biológico” se instalan las tecnologías modernas y colonizan construyéndose el individuo moderno; pero aclarando que en este límite, “emerge la vida como desafío y exceso de lo que nos constituye como “humanos” socialmente legibles y políticamente reconocibles” (E.B.: 11)
En esta línea de pensamiento aparecen los distintos autores que se encuentran en el presente libro.
En el grupo de los tres primeros artículos surge el pensamiento de vida desde la mirada de Foucault, al decir que ella se presenta “como posibilidad de error y capacidad de desvío”; y en el análisis de Delueze como “pura virtualidad” y como potencia indeterminada” (E.B.: 12) coincidiendo ambos sus puntos de vista. Frente a esta situación planteada, Agamben – pensador italiano -, nos habla de la responsabilidad que corresponde a la filosofía redefinir categorías en el pensamiento occidental…
21-7-10 – Marcos - (a la mañana)
(Voy a la primera página del Prólogo)
La relación de la Modernidad con el Biopoder lo inicia Foucault sobre el concepto de hombre que ya lo había presentado Aristóteles como “animal viviente (…) y capaz de existencia política”.
El pensador francés analiza la implementación de diferentes técnicas para colonizar al individuo operando sobre el cuerpo y la salud, la sexualidad, la herencia biológica, …., poniendo a lo biológico como el umbral entre la vida y lo social.
Frente a esto, se puede entender la normativa de la modernidad sobre lo normal y lo anormal; lo saludable y lo enfermo; etc., donde el cuerpo y la vida se constituyeron como la “materia política” en la construcción del individuo.
Retomando nuevamente esta primera página, me gustaría destacar algunos términos que representan conceptos complejos permitiendo afirmaciones, reflexiones y cambios de mirada, en primera instancia en Foucault; y luego, en los otros autores que aparecen en el texto.
En el caso de él, iniciador de tal razonamiento, se observa como importante el haber destacado a la vida en el cuerpo como construcción de su filosofía.
Ahora, siguiendo con los términos (y por ende, los conceptos) ubicaría a las técnicas[2], respaldadas por una visión tecnológica operando en el cuerpo (“instanciación[3] del ser viviente del hombre” E.B.:10), donde aparecen los planteos “de la salud, la sexualidad, la herencia biológica o racial, la higiene, los modos de relación y de conducta con el propio cuerpo” (E.B.: 10).
Pero en el dorso de la primera página del Prólogo, los compiladores continúan diciendo que aunque al ser viviente se lo tome como objeto de las tecnologías, no deja de aparecer la resistencia a la sujeción: “si el individuo coincide con su cuerpo, si el biopoder superpone los mecanismos de control con la inmanencia de lo vivo, ese mismo cuerpo y ese mismo ser viviente se pueden tornar línea de desfiguración, de anomalía y de resistencia contra las producciones normativas de subjetividad y comunidad” (E.B.:10)
21-7-10 – Marcos - (a la tarde)
(Copio lo que le contesté a Silvana en relación al archivo que envié después del mediodía a todo el grupo)
Hola a todos….Estoy cerrando en el 092 la cátedra de Filosofía de la Educación y quiero poner punto final al trabajo del primer cuatrimestre….
Pero no puedo dejar de acercar algunos comentarios sobre lo expuesto por Silvana (Esto parece como lo de los payadores…)
Me parecen interesantes las líneas marcadas en donde se destaca el pensamiento de Agamben que hace mención al concepto de vida definida por dos “monstruos” del pensamiento que fueron Foucault y Deleuze: Una vida (definida por) indefinida y con gran virtualidad para expresar y transgredir en contra del sometimiento y la disciplina en todas sus dimensiones... Por eso que el primer autor hace un análisis profundo sobre la “inmanencia absoluta…” donde la vida es todo potencial, virtualidad.. (al estilo de lo pensado por Spinoza).
(Hay mucha miga y mucho…para seguir pensando en este prólogo lleno de conceptos y términos alrededor de la Biopolítica)
Un gran abrazo y punto final…. Hasta la vuelta….
21 – 7 – 10 Gentile, Silvana Enviado el: Miércoles, 21 de Julio de 2010 04:24 p.m.
Para:Fregosi, Marcos ; Maza, Guillermo Francisco ; 'Claudio Rocca '
Asunto: RE: Grupo de estudio - Reflexiones personales
Para:
Asunto: RE: Grupo de estudio - Reflexiones personales
Hola a todos,
Me parece interesante la mirada de Marcos.
En lo personal he avanzado bastante con la lectura de la obra (muy buena por cierto). Estoy todavía en el prólogo por lo que me resultan familiares algunas expresiones que Marcos remarca.
El concepto de “vida desnuda” de Agamben (si mal no recuerdo hace referencia a esto dada la importancia de que se le dá hoy a la “productividad”) que contrapone al concepto del “pensar” para construir nuevas subjetividades, agotado lo estatalmente instituído en la Modernidad.
De ahí el rescatar a Foucault en referencia al “manejo de los cuerpos” en instituciones de encierro creadas por la modernidad para, de alguna manera, sellarlos ideológicamente (escuelas- hospitales) o , ante situaciones de no acatamiento también recluirlos (cárceles- neuropsiquátricos).
Me falta. Estoy en el prólogo que me parece un buen adelanto de lo que viene.
Buen descanso Marcos, Claudio, Guille. Realmente fue una primera etapa muy trabajada y nos merecemos parar un poco.
Cariños a todos y hasta la vuelta.
Silvana
[1] E.B.: quiere decir Ensayos sobre biopolítica, editorial Paidos, 2007.
[2] Me parece importante para mí, diferenciar técnica de lo tecnológico. Técnica se refiere a lo que se hace (medios y producto); y en cambio, tecnología, apuntaría más a la concepción que uno tiene de esas técnicas. Por lo tanto, en este lugar donde aparece el pensamiento de Foucault no es un dato menor, ya que está remarcando las características que se dan en la construcción del individuo.
Del Diccionario de la Lengua Española :
TECNOLOGÍA.
TÉCNICO,CA
1. adj. De la técnica o relativo a ella:fallo técnico.
2. Que conoce muy bien los procedimientos de una ciencia un arte o un oficio y los lleva a la práctica con especial habilidad:es un jugador muy técnico, pero poco intuitivo.
3. [Palabras o expresión] propia de una ciencia, un arte o un oficio:término técnico.
4. [Cierta especialidad] universitaria de grado medio:arquitectura técnica.
5. m. y f. Persona que posee los conocimientos específicos sobre una ciencia, un arte o un oficio:ha venido el técnico a reparar la lavadora.
6. Entrenador de un equipo deportivo:el técnico daba instrucciones desde el banquillo.
7. f. Conjunto de procedimientos o recursos de los que se sirve una ciencia, un arte o un oficio:conoce la técnica de la hipnosis.
8. Habilidad para hacer uso de estos procedimientos:le falta técnica para dominar el dibujo lineal.
9. Método, táctica, procedimiento para hacer alguna cosa:
quiero que me expliques tu técnica para hacer buñuelos.
quiero que me expliques tu técnica para hacer buñuelos.
[3] “Instanciación”
Diccionario de la Lengua Española
INSTANCIA.
(Del lat. instantĭa).
a ~.
1. loc. adv. A ruegos de, a petición de.
a ~s de.
1. loc. prepos. A ruegos de, a petición de.
en primera ~.
1. loc. adv. Al primer ímpetu, de un golpe.
2. loc. adv. Primeramente, en primer lugar, por la primera vez.
en última ~.
1. loc. adv. Como último recurso, en definitiva.
Retomando nuevamente el término inicial – instanciación – nos está marcando una dinámica donde el ser viviente del hombre aparece. Creo que vale la pena ver en esta frase, términos como “ser”, “viviente”, “hombre”, que en una reflexión filosófica no son menores o de poca jerarquía. Por eso mismo, me parece importante destacar una frase del Prólogo que hace referencia al ensayo de Agamben que pide “repensar las categorías fundantes del pensamiento occidental” (E.B.: 12)
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